lunes, 16 de julio de 2012

Las Navas de Tolosa

Pues sí, fue un día como hoy; un lunes 16 de julio, solo que de hacer 8 siglos... Sí, hoy se cumple el 800 aniversario de la batalla de Las Navas, posiblemente la batalla más trascendental para la historia hispana de todas las celebradas tras la conquista romana (y anda que no ha habido...  ).


Lo curioso ha sido la desinformación mediática sobre el aniversario. Es cierto que he encontrado referencias bastante extensas a la batalla en los dos principales periódicos navarros, y también en algunos periódicos andaluces, pero en los de tirada nacional nada de nada con la salvedad del ABC, donde, ya siento decirlo, han aprovechado para echar leña al fuego de la confrontación religiosa, todo lo contrario de lo que debería hacerse... ¡en fín!  

NADA HAY QUE CELEBRAR. Nunca una masacre debería ser celebrada. Pero sí que debería ser recordada, al menos para conseguir que no se repita; porque la Historia nos recuerda continuamente que las cosas se repiten una y otra vez, simplemente porque no somos capaces de recordar lo que ocurrió y las causas que lo generaron...

Modestamente, desde mi novela "Las últimas águilas negras", he intentado aclarar al lector cómo se desarrolló la batalla y, sobre todo, por qué se llegó a ella (y no hay una sola causa, sino que hay un buen puñado de ellas). Pero no he sido el único. Desde otros puntos de acercamiento, tanto Gonzalo Giner en su "El sanador de caballos", como más recientemente Juan Eslava Galán en su "Últimas pasiones del caballero Almafiera", también describen perfectamente la batalla y lo que la rodeó.

Doy fe que de las tres obras que he citado, al menos las dos últimas ( de la primera no debo hablar ) consiguen atrapar al lector y transportarle a aquellos años tan convulsos y decisivos de nuestra Historia...

sábado, 7 de julio de 2012

De Sanchos y Garcías


Es cuanto menos curiosa la lista de reyes navarros de la dinastía Ximena que se llamaron Sancho y cuyos primogénitos se llamaron García y viceversa. Ahí va la lista:

Sancho I Garcés (rey del 905 al 925)
García Sánchez I (rey del 931 al 970) (del 925 al 931 corregente)
Sancho II Garcés Abarca (rey del 970 al 994)
García Sánchez II el Temblón (rey del 994 al 1000)
Sancho III Garcés el Mayor (rey de 1000 al 1035)
García III Sánchez el de Nájera (rey del 1035 al 1054)
Sancho IV Garcés el de Peñalén (rey del 1054 al 1076)
... Dinastía Ximena aragonesa (1076 a 1134, incluye a Sancho V)
García Ramírez el Restaurador (rey del 1134 al 1150)
Sancho VI Garcés el Sabio (rey de 1150 a 1194)
Sancho VII el Fuerte (rey del 1194 al 1234)

El origen está en la antiquísima costumbre hispana de dar al primogénito varón el nombre de su abuelo; vamos como si la llegada del nieto supusiera la pronta o inmediata ida al más allá del abuelo y que así, al menos el recién nacido llevase en su nombre el recuerdo del desaparecido o destinado a desaparecer. No hay que echar la vista muy atrás para ver que esta costumbre se había mantenido. Buscad entre vuestros abuelos y seguro que encontráis más de un caso con el nombre compuesto primero por el santo del día de su nacimiento y, segundo, por otro nombre que, curiosamente, solía coincidir con el de vuestro tatarabuelo...

Pero volvamos a la época medieval en la que discurre la novela (de 1134 a 1234). En la lista de arriba podéis comprobar que García el restaurador continuó la tradición Ximena e impuso a su primogénito el nombre de Sancho (el futuro Rey Sabio), pero éste tuvo como sucesor a otro Sancho (el rey Fuerte) y no a otro García como marcaba la tradición...

Esa ruptura de la tradición ha dado lugar a muchas especulaciones. ¿Tuvo Sancho el Sabio un primogénito varón al que llamó García, que murió siendo muy niño y que, por tanto, el futuro Sancho el Fuerte hubiera sido en realidad su segundo hijo? La pregunta del millón...

Pues es posible... La cuestión es que no existe una fecha cierta ni para el matrimonio de Sancho el Sabio con la princesa Sancha de Castilla ni tampoco para el nacimiento de Sancho el Fuerte, lo que alimenta esa especulación. Hay historiadores que indican que la boda entre don Sancho y doña Sancha se celebró en 1053 y que dan como fecha de nacimiento de Sancho el Fuerte el año 1160, lo que hubiera dejado 7 años de intervalo para que la pareja real hubiese tenido un hijo (ese supuesto García muerto al poco de nacer). Sin embargo, otros historiadores indican que la fecha de 1053 es sólo la firma de los esponsales (el contrato matrimonial), dejando la boda en sí para unos pocos años más tarde dada la juventud de doña Sancha y que, además, adelantan el nacimiento de Sancho el Fuerte al intervalo (1155-1157), lo que deja muy poco margen para que ese supuesto García hubiera visto la luz...

No puedo pronunciarme a favor de ninguna de las dos corrientes, pero la idea de que Sancho el Fuerte hubiera podido tener otro hermano más siempre me ha seducido, y lo he reflejado en la novela de otra forma... Espero que os guste.